Todos conocemos y solemos hablar de las “malas posturas” podemos reconocer como de siente una persona según su postura. Reconocemos a alguien cuando está feliz, triste, deprimido o enojado. Incluso hay quien dice que si sonreímos, aunque no tengamos ganas, nos cambiará el ánimo.

La postura influye en el funcionamiento de nuestro cuerpo y también en cómo nos sentimos, y cómo pensamos. Una mala postura mantenida durante años puede afectar a un órgano determinado y ocasionar una dolencia crónica.

La buena postura nos dota de flexibilidad de movimientos, mayor fuerza física y mental, nuestro aspecto es mejor y nuestro cuerpo puede trabajar con mayor eficacia y prevenir mejor las enfermedades.

Un pequeño, pero constante cambio en la postura será a la larga más efectivo y respetuoso con nuestro cuerpo que tomar un analgésico o antiinflamatorio tras un duro día de trabajo, para proseguir con el mismo ritmo y el mismo error postural día tras día hasta que el cuerpo diga basta.

Somos los dueños de nuestra propia salud, y podemos estar alerta frente a lo que nos beneficia o perjudica, siendo más conscientes de qué debemos cambiar, y cómo hacerlo. Esto es un proceso natural. Ya sabemos que no crece una flor de un día para el otro. Con el cuerpo y nuestra salud ocurre lo mismo.

La Quiropraxia es la única ciencia de la salud capacitada para chequear tu columna vertebral y ajustar las vertebras que estén subluxadas o “desalineadas” y que causen presión sobre nuestros nervios espinales, de esta manera nuestro cuerpo se expresará de la mejor manera y adquirirá una mejor postura, pero sobre todo, y lo mas importante, mejor salud!

Probá la Quiropraxia, y experimentá estar al 100%.